"- Mira en lo que ha quedado nuestro paraguas de payaso de circo - dijo el coronel con una antigua frase suya. Abrió sobre su cabeza un misterioso sistema de varillas metálicas-. Ahora solo sirve para contar estrellas. Sonrió. Pero la mujer no se tomó el trabajo de mirar el paraguas. - Todo está así -murmuró-. - Nos estamos pudriendo vivos. Y cerró los ojos para pensar más intensamente en el muerto."
53 años han pasado desde que
García Márquez publicara “El coronel no tiene quién le escriba”. Mi única pena
es que parezca escrita para nuestros días. Grande Don Gabriel, le echaremos de
menos. Buen viaje y descanse con su dios.
Coldplay “Paradise”: https://www.youtube.com/watch?v=1G4isv_Fylg
Ingredientes:
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Rebanadas de pan de molde
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Leche entera
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Huevo
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Crema de cacao
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Canela
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Azúcar
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Aceite de oliva suave
Lo primero es aplastar las
rebanadas de pan de molde con un rodillo para dejarlas lo más finitas posible.
Una vez hecho esto untamos de crema de cacao uno de los bordes, justo el que
queda por fuera a la hora de enrollar para que quede pegado. Otra opción es
untar toda la rebanada, pero es demasiado chocolatazo para mi gusto. Hacemos
los rollitos y reservamos.
En una cazuela ponemos la leche
(dependiendo de la cantidad de torrijas, así será la de leche) con una ramita
de canela y llevamos a ebullición, bajamos el fuego y dejamos cocer durante 10
minutos. Esta leche infusionada hay que dejarla enfriar antes de impregnar los
rollitos en ella, porque si no, se desharían. Así que una vez fría o templadita
empapamos los rollitos de pan con cuidado para que no se rompan.
A continuación pasamos por huevo
batido y freímos en abundante aceite hasta que se doren. Dejamos escurrir en
papel absorbente y decoramos con canela en polvo y azúcar glass en mi caso.
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